Debutante...

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que bueno que el 15 es feriado!!!!
He tenido una semana con mucha pega y resfriada ando a la rastra, me dolia todo.Me comuniqué con el Oso (un amigo virtual, mas que amigo, mas que virtual, mas que.. no se) Y me dio alegría verdadera saber de él (no mucho, pero al menos saber que no ha muerto). Es como mi amor platónico, mi fantasía erótica escondida. jajaja.

Hoy me tocó uno de esos días que me hacen pensar y que tocan hondo en mi corazón. Hoy recibí un paciente "debutante", le llamamos debutante a los niñitos que son diagnosticados con Diabetes mellitus. Eso implica que su vida, la de sus papás y la de su familia va a cambiar 180º, tendrán que decirle adios a muchas comidas y cosas. Y aprender un montón de otras no muy agradables, como a ponerse insulina, pincharse unas 5 veces al día para tomarse glicemias (nivel de azúcar en la sangre), vivir pendiente de horarios, hacer ejercicios, etc Y hacer al médico su amigo mas querido, ya que lo va a estar visitando muy muy seguido. Al menos al principio. Los primeros años son muy difíciles, especialmente cuando son niños muy pequeñitos que no entienden porqué tienen que privarse de comer algunas cosas, o comer todo, o seguir horarios y los padres se transforman en las personas responsables casi 100% de su supervivencia.

Mi trabajo consiste en sentarlos en mi oficina varias veces a la semana, mes, año... y contarles una y otra ves todas estas cosas con optimismo y cariño, ponerlos al díaen los avances y las nuevas técnicas. Sin que se convierta en un cuento de terror, ni se tome a la ligera. Es un proceso largo, agotador a veces. Y mi tarea es acompañarlos y educarlos.

Hoy me tocó conversar con unos papás muy jóvenes de una chiquita "debutante" de 5 años... Antonia. No pude evitar pensar en mi hija que tiene la misma edad. Me emocionó la fortaleza de ambos y el cariño con que el papá apoyaba a la mamá cada ves que a ella se le llenaban los ojitos de lágrimas. Quisieron pincharse los dedos, para saber que sentía su niña cada ves que le toman un control de Hemoglucotest y al retirarse se fueron tomados de las manos. Les dije que era una situación en la que debían estar unidos, que no era culpa de nadie, que es una enfermedad que por el momento no tiene cura y que es para toda la vida, que con el tiempo la pequeñita lograría una vida relativamente normal.

Cuando se fueron los papás de la Antonia, pensé en lo que significa mi trabajo, pensé en que es lo que me gusta hacer, enseñar, educar, apoyar, hacer las cosas con cariño y dedicación, pensé en mi hija, pensé en el papá de mi hija: Pensé en que ojalá nunca pierda la perspectiva y me automatice y me transforme en una vieja regañona que hace lo justo y necesario y se va pa' la casa. Pensé en mi mamá que me decía que había que dar lo mejor de si, en donde fuese. Y me alegré por Antonia porque a pesar de que no tenemos los mejores medios y que no se está atendiendo en la Clínica Alemana ni nada por el estilo al menos tiene algunos recursos que antes no existían. Pero sobre todo... porque tiene unos papás que valen oro.

"Señor no dejes que mi corazón se enfríe jamás... mantenlo siempre calentito"