La NIEVE Derritiendose...

Hoy tenía muchas cosas que hacer. Pero no he echo ninguna. Ni he ido donde tenía que ir. Hoy ha sido MI día. He dormido a pata suelta. jejeje.
Ayer-noche => Me di cuenta de qué es lo que quiero. Me di cuenta dónde está mi corazón hoy en día.

Por fin el EX está donde tiene que estar en mi vida. Ya no existe esa unión con él que me hacía sufrir. Anoche le devolví las canciones que eran nuestras. Y le desee suerte en sus cosas. Puedo hablar de mujeres con él y no me dan celos, puede contarme que carreteó toda la noche y no me siento mal. Y puedo darle consejos con otras mujeres y "no me hace daño". Puedo estar sentada cerca de él y no siento nada malo. Puedo abrazarlo y que ese abrazo no sea mas que eso. Yo creo firmemente que entre las personas se crean lazos energéticos, por donde va y viene la energía. Las madres con sus hijos, las parejas, los amantes las tienen. Ese lazo tan fuertemente obsesivo, y poderoso que tenía con él ya no está. No lo siento. Lo liberé. Somos realmente libres el uno del otro (bueno, no se si él de mi. pero al menos yo si). Ya no me afectan sus estados de ánimos, ni sus palabras, ni los recuerdos. Y de verdad, deseo lo mejor para él.

Que extraño. Siento como si yo fuese una torta cubierta de crema. En la que él por mas que quiera, no puede pasarle el dedo.. jajaja. Esto ha sido muy rápido en verdad. No pesé que iba a ser capaz de hacerlo tan rápido. (Gracias Flores de Bach!!!).

Y entonces.. pienso ¿donde está mi corazón?. Y cierro los ojos y repaso las personas de mi vida. Mi corazón esta en primer lugar conmigo y en segundo lugar con mi hija. Con cada una de las personas de mi familia y algunos amigos.

Es tan extraño... ni siquiera extraño al oso. Pienso en él, es verdad. Pero no como antes. Lo pienso como... un dulce amigo. No con esa pasión que sentía por él. Lo pienso en paz. No con esos deseos obsesivos que me hacían llorar. Tiempo atrás... si el oso me hubiese propuesto cosas indecorosas (jejeje) le hubiese dicho que si de buena gana. Hoy... las cosas cambiaron. Mis sentimientos cambiaron. Mis decisiones cambiaron. Yo he cambiado. Y lo que quiero lo tengo tan claro como el agua. Así como lo que me merezco. Y lo que valgo.

Quiero compromiso. Pero entiendan que no es un anillo en mi dedo. Si no que, ese compromiso que nace del alma. Esa confianza que hace saber que hay alguien pensando en ti, por mas lejos que estés. Que esa persona confía en ti y tú en él. Ese compromiso que llena tus días de sonrisas calladas. Ese compromiso que hace que sepas que es ÉL y nadie mas que ÉL. Que te está amando. Que no se va a ir lejos. Que no hay mas miedos que los normales. Ese comprmiso que te hace conversar de cualquier cosa sin prejuicios. Ese compromiso que espera, que camina de la mano un día sábado aburrido. Ese compromiso que se ama locamente en una cama compartida un fin de semana, sin temores ni preguntas de si volverás a llamarme o de si me quieres... porque ya sabemos que es asi. Ese compromiso que no necesita anillos, ni vivir siempre juntos. Ese compromiso que te da paz. Ese compromiso que sabe esperar.

No quiero sexo, ni anillos de bodas, ni nada de eso. Quiero amor. Quiero Amar. Quiero poder entregar mi amor a alguien que me ame. Quiero entrega. Quiero un hombre de verdad, que siendo tan hombre no tema entregarse a mi. Que no tenga miedo. Porque yo solo quiero amarlo y aprender junto a él. De su mano. Quiero un compañero alegre, optimista, paciente. Un amigo.

Siento que merezco estas cosas. Siento que quizás, por ahi alguien timidamente quiera intentarlo conmigo. Siento esa sensación de ¿porqué no?, ¿porqué no yo?, ¿porque no una segunda oportunidad?. Pero la siento aquí adentro.. de verdad. No hay apuros (como dijo alguien por ahi). Es verdad, no hay apuros. Tengo mucho tiempo.

Cuando tenga que llegar... llegará. Como una mañana de sol. Como una luz en la oscuridad. Como la tibieza del sol en invierno. Llegará un día y querrá conocer mi historia y amará mi voz, y la suavidad de mi piel, y las marcas en mi cuerpo y el color de mi pelo. Y en el abrazo tibio, sabremos que estamos en casa al fin.

Porque el invierno no dura para siempre.. y en mi ventana la nieve ha comenzado a derretirse...

... Y estoy feliz, feliz de que eso suceda...